La relación entre los colores se puede mostrar mediante el uso de la rueda de colores.

La rueda de colores muestra vínculos entre diferentes colores según el contenido de rojo, amarillo y azul de cada color. Fue desarrollado por primera vez por Sir Isaac Newton en 1666.

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El círculo cromático es un instrumento en el que los colores se organizan y segmentan circularmente, en base a su tono o matiz. Facilita la toma de decisiones para conformar paletas cromáticas armonizadas. Dicho en menos palabras, te ayuda a identificar combinaciones “correctas”, a partir de un modelo visual de fácil uso y comprensión.

Aunque podemos encontrar variantes de rueda de colores con separaciones desde 3 (círculo cromático de colores primarios) 6 y 12 secciones o incluso un círculo cromático de 24 colores, el principio es básicamente el mismo y la secuencia siempre fluirá del verde hacia el amarillo, anaranjado, morado y azul.

Fue el mismísimo Sir Isaac Newton quien estableció, a partir de sus experimentos con prismas, los primeros modelos de círculo cromático. A lo largo de los siglos esta útil herramienta ha continuado su evolución, perfeccionando la manera en que entendemos e interactuamos con el color

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La variante más útil y más utilizada de la rueda de colores se muestra en la imagen de arriba, que incluye rojo, rojo-naranja, naranja, naranja-amarillo, amarillo, amarillo-verde, verde, verde-azul, azul, azul-violeta, violeta. y combinaciones de violeta-rojo. (Stone, 2008).

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Bleicher (2011) afirmó que la rueda de colores se puede clasificar en tres tipos principales de colores según la combinación de colores base utilizados para crear el color final, de la siguiente manera:

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Colores primarios

Rojo, amarillo y azul. Constituyen el fundamento fisiológico de la teoría del color, pues son los tres colores que percibimos cuando la luz impacta en los 6 millones de conos que alojan nuestros globos oculares. Son, además, colores que no se pueden obtener a partir de la combinación de otros pigmentos.

Esta capacidad humana, denominada “tricromía”, es considerada la norma para los humanos y permite percibir alrededor de un millón de colores. En los raros casos de cuatricromía, experimentada por menos del 2% de la población mundial, es posible llegar a percibir más de 100 millones de variantes cromáticas.